1. Dios
Creemos que hay un solo Dios, quien es el creador y redentor del universo (Deut. 6:4).

a) Creemos que Dios es Espíritu y es una persona (Juan 4:24).

Creemos que Dios es perfecto en todos Sus atributos, es Eterno, Inmutable, y se sostiene a Sí mismo por Su propio poder (Mat. 5:48; Mal. 3:6).

Creemos que Dios se ha manifestado en tres personas, conocidas como: Padre, Hijo y Espíritu Santo (Isa. 43:10; Mat. 28:19; Luc. 3:22), y aunque son uno en sustancia y propósito, son diferentes en posición y función (Juan 14:28; Juan 16:7; 2 Cor. 13:14).

2. Jesucristo
Creemos que Jesucristo es el único salvador enviado por Dios al mundo y que es suficiente para salvar a todos los que claman a Él con fe, por virtud de Su muerte y resurrección.

a) Creemos en Su divinidad, ya que Él es el Dios eterno (Juan 1:1-14; 5:17-18; Rom. 9:5).

Creemos en Su humanidad, ya que nació de la virgen María (Luc. 2:4-7).

Creemos que vivió una vida sin pecado (Heb. 4:15), se ofreció en la cruz del Calvario como expiación por los pecados del mundo (Isa. 53; Mar. 10:45; Rom. 5:6, 8-10; 1 Cor. 15:3).

Creemos que resucitó corporalmente de entre los muertos al tercer día (Hech. 2:23-24; 3:15; 4:10; 1 Cor. 15:4-8; Gál. 1:1).

Creemos que vendrá de nuevo en poder y gloria (Hech. 1:11; Apoc. 19:11). Su venida será física y visible para toda la humanidad (Mat. 24; Juan 14:1-3; Fil. 3:20; 2 Tes. 1:10).

3. El Espíritu Santo
Creemos que el Espíritu Santo fue enviado para convencer al mundo de pecado, justicia y juicio, y para impartir la naturaleza de Dios a todos los que creen en el Señor Jesucristo (Juan 16:8; 2 Ped. 1:4).

Creemos que Él es divino y es una persona (Hech. 5:3-4; Juan 14:16-17).

Creemos en Su ministerio en la iglesia, que consiste principalmente en guiar, enseñar, santificar y capacitarla para realizar las obras de Cristo y testificar al mundo de Su amor (Juan 16:5-13; Hech. 1:8).

Creemos que Su ministerio en el creyente, como individuo, se manifiesta en tres formas:

• Impartiendo la nueva naturaleza en nosotros (Juan 3:1-15).
• Santificándonos y produciendo el fruto del Espíritu en nosotros, formando el carácter de Cristo. Esto es una experiencia progresiva lograda al permanecer en Cristo (Juan 15:1-17).
• Impartiendo poder y habilidades para el servicio, y Sus dones a través del bautismo del Espíritu Santo, con la evidencia inicial de recibir nuestro lenguaje de oración (Mat. 3:11; Hech. 2:33; 10:44-46; 19:1-7).

4. La Palabra de Dios
Creemos que las Sagradas Escrituras, Antiguo y Nuevo Testamento, son la palabra de Dios dada a la humanidad como luz de salvación para los perdidos y como guía para los redimidos.

Creemos que fueron dadas bajo la inspiración del Espíritu Santo y que esta inspiración no solo descansa en los pensamientos expresados, sino también en las mismas palabras usadas por los escritores bíblicos (2 Tim. 3:16-17; 2 Ped. 1:20-21).

5. Salvación
Creemos que el hombre fue creado a imagen y semejanza de Dios (Gén. 1:26-27). Sin embargo, por su propia decisión, el hombre cayó y, por lo tanto, incurrió no solo en la muerte física, sino también en la muerte espiritual, que es “separación de Dios” (Rom. 5:12-19).

Creemos que la salvación es por fe en la obra consumada de Jesucristo en la cruz. Esta fe producirá un arrepentimiento genuino, que es un cambio de mentalidad respecto al pecado y todo lo que no agrada a Dios, resultando en un cambio total de acciones (Hech. 2:37-38; 3:19).

Creemos que la salvación no solo significa redención por Su sangre y el perdón de pecados, sino que también incluye sanidad para nuestros cuerpos, autocontrol sobre nuestras mentes, autoridad sobre el diablo y todas las obras de las tinieblas, y la futura redención de nuestros cuerpos (Ef. 1:7, 19-23; Mat. 8:17; Fil. 4:7; Luc. 10:19; Rom. 8:23).